miércoles, 28 de abril de 2010

La Ley de Igualdad no es el problema

La ley de Igualdad no es la causante de los abusos que puedan realizar los trabajadores en el desempeño de sus funciones. Intentar vincular estos conceptos supone confundir a la opinión pública.

Desde la Secretaria de Mujer e Igualdad de la Federación de Servicios Públicos de UGT queremos denunciar el mensaje que se ha divulgado desde algunos medios de comunicación y sindicatos, vinculando los comportamientos deleznables de algunos funcionarios de la cárcel de mujeres de Alcalá-Meco y la implantación de la Ley de Igualdad.

Este tipo de declaraciones oportunistas no hacen sino contribuir a que las desigualdades laborales y sociales entre mujeres y hombres sigan manteniéndose. A su vez, manchan el nombre de la Institución Penitenciaria y de los trabajadores que la conforman.

La ley de Igualdad declara la equiparación de oportunidades en el ámbito laboral y posibilita que se incorporen los recursos necesarios para la realización del mismo; respetándose al mismo tiempo el derecho a la intimidad o cualquier otro que quede reconocido en el ordenamiento jurídico.

La unificación de las escalas en el cuerpo de Ayudantes de Instituciones Penitenciarias es un paso adelante para la real equiparación de derechos y deberes de los funcionarios, con independencia de su género. Precisamente antes de esta unificación las mujeres tenían menos oportunidades de acceder a estos puestos de trabajo porque el número de plazas era inferior en comparación al número reservado a los hombres.

Estos comportamientos que están siendo investigados no representan, qué duda cabe, la generalidad del comportamiento de los trabajadores y trabajadoras de este colectivo.

Desde la Federación de Servicios Públicos exigimos al Ministerio Interior la investigación de estos casos depurando las responsabilidades a cualquier nivel de los trabajadores que hayan participado o permitido este tipo de conductas.